Los Rocola son una fiesta permanente que explota con fuerza arrolladora sobre la tarima. Esa fuerza pega duro en el público y la gente se mete al baile con facilidad. Su música está hecha para la gozadera y la diversión y -además- está aderezada con una dosis de crítica social importante; sin embargo, no es para sufrir. Eso es lo que proponen en cada ocasión que se suben a un escenario.
Definidos por ellos mismos como la banda más ‘chimba’ del universo, ahora se lanzan a la conquista musical de Europa. El grupo nació hace casi diez años en el Valle de los Chillos, Quito, con el sello de la amistad del barrio, como recurso principal.
De aquellos primeros integrantes sobreviven Paolo Moncagatta, en el bajo; e Iván Mendieta, en la voz y guitarra. Ellos son los que van más al frente cuando participan en una tocada.
La formación del grupo ha sido muy intermitente hasta que hace aproximadamente cinco años quedaron estructurados con el baterista José Andrés Terán; Santiago Rosero, en la percusión latina, Galo Pozo como trompetista; Hernán Vélez y José Fabara, en los trombones, Miguel Sevilla, en el saxofón y los teclados; y Hugo Ordóñez, en el otro saxofón.
Definirlos musicalmente es harto difícil pues tienen un concepto rebosante de influencias musicales, temáticas y actitud. Como son nueve, se permiten que un disco suene ricamente ecléctico y versátil sin, necesariamente, proponérselo. Eso se puede rastrear en su último trabajo, “Infierno”, presentado en 2007 y producido por el argentino ‘Tweety’ González, el mismo que ha trabajado con Soda Stereo y Fito Paéz.
Embebidos del amplísimo espectro de la música popular contemporánea, así como de las vertientes tradicionales y académicas del mundo, no tienen empacho en decir que beben tanto de la chicha, el sanjuán y la cumbia, como del punk, el hardcore, el jazz y la música clásica.
Esas credenciales son las que presentarán en Europa con leyendas de la música mundial como los creadores del ska, los jamaiquinos The Skatalites, Mad Profesor y Ernest Ranglin. También actuarán junto a Chichi Peralta y Wisin y Yandel; y explorarán ambientes underground con activistas punk de tendencias anarquistas. Todo aquello lo asumen como una experiencia diversa culturalmente de la que pretenden salir enriquecidos como personas, músicos y gestores culturales.
Para el percusionista Santiago Rosero es gratificante el ‘boom’ que se ha producido en Ecuador en los últimos cinco años respecto al surgimiento de bandas, a la producción de discos y a la variedad de nuevas propuestas. Ese es un punto de partida para aventurarse en el resto del mundo.
Los Rocola van de frente con el disco “Infierno”. Ahí se asoman aires de jazz ‘swingueado’, algo de polka, cumbia, rock -por supuesto-, buen trabajo vocal y de coros, y terminan con algo así como un tema tradicional klezmer o judío. En el idioma Rocola Bacalao sería, un “champú posmoderno con características de vanguardia chimba”, nada mejor para bautizar lo que hacen. Ojalá los europeos se rindan a su embrujo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario